¡Feliz día familias Tinkuy!

Por Yassira Huarcaya

La idea del Family Day o una celebración familiar viene rondando al equipo desde hace algunos meses e incluso años. ¿Por qué no celebran el día de la madre o el día del padre? ¿Qué hay del día de los abuelos? Son las preguntas que llegaban a nosotres por parte de las familias. Nuestra postura siempre ha sido clara: somos conscientes de la diversidad de familias que tenemos, y hacer una celebración específica nos hacía un poco de ruido. Siempre fue un tema que quedaba en el tintero y al que le dimos vueltas una y otra vez. Un día, en una reunión de equipo, surgió la idea de un family day para celebrar a las familias de Tinkuy. Buscamos que coincidiera entonces con el Día de la Familia Peruana (segundo domingo de septiembre).

Nos enrumbamos en esta aventura de crear un día tipo “gymkana” sin saber lo que nos esperaba. Preparamos los juegos y competencias con la expectativa de que las familias y Pumas se diviertan y se integren. Nunca habíamos realizado un evento de este tipo. Recuerdo que pensamos “¿Cuánto tiempo necesitarán para preparar su barra?, ¿serán 10 o 20 minutos?, quizás más porque recién preparan allá sus cosas”. Grata fue nuestra sorpresa al ir escuchando cómo las familias se iban preparando para el gran día y más grato aún llegar al lugar elegido y ver como todo cobraba forma.

El equipo rojo preparó barras pegagosas que fueron acompañadas de tambores y globos, sus rostros se llenaron de color rojo con dibujos distintivos y sus narices de payaso rojas. El equipo amarillo resaltó con la cantidad de color que lograron recolectar en accesorios y pancartas, se llenó de brillos con sus sombreros, carteles y collares de Año Nuevo. El equipo verde tenía pompones, banderas que no solo ayudaban en la barra sino que utilizaron para identificar sus carpas, y tenían su propia mascota, Tomás. El equipo azul, fue coreográfico al mostrar su barra en la presentación y contagiaron con su energía.

La energía y disposición que las familias llevaron al Family day se vió reflejada en sus participaciones en cada competencia. Vivieron cada uno de los juegos con mucha garra. Pudimos observar diferentes reacciones y características, algunes solo disfrutaban de las competencias, otres eran estratégicos para alcanzar la victoria, otres tuvieron la capacidad de motivar a todo su equipo y sostener la energía durante toda la gymkana y otres llamaban a la calma siendo la voz de la razón cuando los ánimos caldearon.

Lo que se vivió en el Family Day fue novedoso e interesante. Las guías usualmente no tenemos este tipo de vínculo o interacción con las familias, y verles en otros espacios nos da información que no es accesible normalmente. Considero que las competencias son útiles y sanas para la vida; te dan lecciones que te sirven en el día a día. Asimismo, despiertan diversas emociones. No diré que buenas o malas, porque considero que no hay emociones malas; pero sí de las que movilizan el impulso y superan la razón. A todes nos pasa en algún momento y considero que es liberador en muchos sentidos. Que este revuelo de emociones nos ayude a empatizar con los Pumas y previo a acompañarles, preguntarnos, ¿cómo reaccionaría o reaccioné yo en una situación similar? Solo piénsenlo: si nosotres, siendo adultes, nos dejamos llevar, imaginen lo complejo que puede ser para los Pumas.  

Gracias familias, por un día tan maravilloso lleno de emociones diversas, gracias por mostrarnos su compromiso de construir una linda comunidad, gracias por mostrarnos sus lados más frágiles y dejarles acompañarles, gracias por recepcionar y reflexionar en base a lo que compartimos con ustedes, gracias por acompañarnos a construir una educación diferente poniendo nuestro granito de arena.

Por eso y más… ¡Feliz día familias Tinkuy!