Esta segunda semana ha sido una en la que el Studio ha iniciado un proceso importante de maduración. Mejorar su concentración durante Core Skills, trabajar en equipo en el Lip Dub, saber asumir las consecuencias de sus actos, ser justos con los compañeros al determinar las consecuencias de los suyos, son aprendizajes que emergieron esta semana.
Los chicos y chicas del Studio Discovery han dejado ver lo rápido y bien que se han integrado. Si bien hay desacuerdos y disputas, igual comparten siempre su snack y almuerzan todos juntos, corren por todo Tinkuy durante su Free Time y se apoyan con algún tema complicado de los Core Skills o Writer’s Workshop. Además, poco a poco han ido avanzando con la organización del Lip Dub, asumiendo el liderazgo ante los otros Studios. Este es uno de los principales proyectos que están trabajando como equipo en este trecho.
Aunque les cuesta un poco, van también empezando a organizar sus propias metas académicas y rendirse cuentas los unos a los otros cuando no las alcanzan. Han experimentado, de a pocos, la idea de “Libertad con Responsabilidad”, medular para su éxito en Tinkuy. Se trazaron al inicio metas bajas, para cumplirlas, pero empiezan a darse cuenta que con poco esfuerzo viene menos libertad. Tal vez en las siguientes semanas se atrevan a apuntar más alto para mantenerse en el nivel de libertad en el que están.
En la convivencia, han surgido dos temas fundamentales para la formación de su carácter de héroes: 1, que sus decisiones tienen consecuencias y 2, el concepto de justicia. Todo esto alrededor de los sistemas que ellos mismos han creado y que seguirán puliendo durante este primer trecho. Luego de revisar la política de strikes, tres strikes fueron ganados por violar el código de honor. Una gran oportunidad para aprender y seguir creciendo. Han empezado a darse cuenta de que el poder que tienen como tribu para decidir sobre las consecuencias de las decisiones del resto de sus compañeros y compañeras debe ser ejercido con responsabilidad y justicia. Es una gran lección que aprendan, desde jóvenes y en la práctica, a no abusar del poder que su comunidad les otorga.