Semana 6
Esta semana los Explorer han disfrutado del juego de roles y su capacidad de escucharse y compartir momentos en aquellas tiendas o servicios de su interés, permitiéndose ser parte de ellas y atendiéndola como mejor lo saben hacer. Dentro del país “Emprendexplorer”, cada equipo se hizo cargo de una de las 3 negocios escogidos. Por iniciativa propia, los equipos empezaron por un "branding" pues fue su idea que los negocios llevaran nombres especiales y divertidos: la “Veterinaria Perritos”, la “Veterinaria Gatitos” y la “Heladería Congelados”. Luego tuvieron que acordar qué necesitan en sus negocios, qué hace falta para hacerla funcionar, e incluso introduciéndose a cómo es que valoramos y pagamos nuestros servicios. Su objetivo era preparar y atender con amor y cuidado a sus clientes.Todo ello, motivados por videos y utilizando materiales reciclados para implementar cada negocio.
Por otro lado, los momentos del día en Tinkuy cada vez se van viviendo con más presencia plena y armonía. Con la propuesta del “círculo rápido, seguro y silencioso”, se ha podido desarrollar en los Explorer el compromiso y las ganas de ser parte de tal espacio. Por supuesto, todavía hay algunos que se resisten, pero sus compañeros y las guías los invitan con cariño, paciencia y firmeza a contribuir a la paz de la tribu. Es un proceso natural que a algunos les cueste más que a otros.
Los Explorer están tomando más las responsabilidades y realizándolas con más autonomía y autorregulación. Los encargados del día y los ayudantes escogidos llevan esta tarea con suma convicción y cuidado. Los explorer sienten que esta labor requiere de mucha concentración y disposición para procurar que a nadie le falte lo necesario y ponen todo de su parte para eso. Este momento, despierta en ellos las ganas de compartir, conversar, colaborar y formar relaciones seguras y afectivas con los miembros de su tribu.
Finalmente, el juego tranquilo les proporciona un espacio de concentración para lograr objetivos cada vez más retadores, que son utilizados con suma autonomía y entrega; valorándose y reconociendo capaces. Muchos de ellos demuestran en su rostro la emoción que les genera el completar estos retos, a través de una sonrisa de oreja a oreja, y al mismo tiempo, diciendo frases como: “lo hice yo solo esta vez” (Joaquín), “Nunca había terminado una mandala antes” (Amadeo), “ya estoy haciendo mi juego individual” (Leonardo), “Mira lo completé” (Lucía) o “ya está, mira” (Daniel). Definitivamente, un gran momento para ellos y ellas de aprendizaje independiente y profundo.