¡Nos vamos acercando al final de este 3er Trecho!

Esta semana se identificó un problema en el Studio respecto al trabajo en Core Skills: con excepción de Maxi y Moana, el avance en matemática estaba siendo muy pobre, ¡casi nulo!. Los chicos habían estado avanzando con el grado que les correspondía de acuerdo a su edad en Khan Academy, pero no estaban logrando cumplir sus metas y casi ni avanzaban. Esto generaba frustración y más resistencia contra la materia. Ahora han empezado a trabajar desde 2do y 3ro de primaria, para que puedan consolidar todos los temas previos y resolver todas sus dudas. Rápidamente se pudieron observar los cambios, pues al día siguiente los chicos comentaban emocionados sus logros y cómo ahora sí disfrutaban trabajar Math. Esperamos que pronto, con esfuerzo y dedicación, puedan alcanzar el mastery de los grados pendientes.

Habiendo ya terminado de viajar por sus recuerdos para crear sus Memorias para el Writer’s Workshop, esta semana la han dedicado a revisar, pulir y editar su trabajo. El trabajo en parejas y en grupos, el tener que juzgar el trabajo de los demás y recibir críticas por el suyo, además de retarlos académicamente, los desafía en su capacidad de escuchar con la menta abierta, asertividad, paciencia, entre otras habilidades.  

Por otro lado, aunque los chicos no lograron “catch up” con el Quest, esta semana se dedicaron a armar las camas para sus jardines: cortaron cartones para las bases, tomaron medidas para cubrirlas con plástico, clavaron clavos para separar las parcelas. Si bien el estar en un espacio abierto (la azotea) y este tipo de actividades inusuales los tuvo distraídos, el Community Garden va terminando de tomar forma.

Finalmente, ¡la tribu se despide de un héroe! Nuestro querido compañero Èmile y su familia regresan a Bélgica. Èmile tuvo la oportunidad de compartir con sus compañeros de viaje algunas fotos muy lindas de su ciudad, casa y barrio en Namur, que todos disfrutaron mucho: ¡Todos querían irse a Bélgica con Èmile! Cada héroe le pudo decir unas palabras de despedida muy afectuosas y compartieron un momento muy lindo. Las puertas de Tinkuy quedan abiertas para Èmile para cuando quiera volver.